Eduardo Alan estuvo perdido en las dunas del Nihuil
El Dakar sigue siendo el Dakar, se corra en África o en Argentina. La muestra más triste fue lo que le pasó al francés Pascal Terry, la primera victima falta de esta nueva versión. Pero las desventuras de estos “aventureros” continúan día tras día. Ayer le tocó el turno a Eduardo Alan, uno de los argentinos que corren en motos, que estuvo perdido por más de 12 horas.
Poco antes de llegar al último control de paso de la quinta etapa, a unos 15 kilómetros de la meta, tuvo una falla mecánica y quedó a la espera de ayuda. Debido a que el Iritrack, un dispositivo de emergencia que sirve para pedir ayuda, no funcionó el argentino quedó jugado a su suerte.
Desesperados porque Alan no había llegado al campamento de San Rafael, a la medianoche Andrés González y Martín Caffarena, miembros del Pampa Racing, decidieron ir al Nihuil para tratar de encontrar al motorista.
Recién a las 3.15 de hoy Alan se comunicó por celular con Gustavo Lossendiere, jefe de prensa de su equipo. Le informó que estaba perdido con otro competidor en las dunas y que no podía pedir auxilio por la falla al sistema provisto por la organización.
A las 7 de la mañana a González y Caffarena se habían unido otros amigos, pero seguían sin encontrar a Alan. Pero habían tenido una comunicación telefónica que les dio tranquilidad. Los pilotos estaban mojados y con frío por el temporal que azotó ayer a la zona.
Hoy muy temprano uno de los helicópteros de la organización estaba sobrevolando las dunas. Alan lo vio, pero los tripulantes de la aeronave no.
Pasadas la 8.50, Lossendiere volvió a comunicarse por celular con Alan. El diálogo siguió hasta que el motociclista vio con un endurista que andaba por el lugar. Los auxilió, les dio barras energéticas, y los llevó al encuentro con González y Caffarena.
Otra de las historias del Dakar, que por suerte tuvo un final feliz.
Poco antes de llegar al último control de paso de la quinta etapa, a unos 15 kilómetros de la meta, tuvo una falla mecánica y quedó a la espera de ayuda. Debido a que el Iritrack, un dispositivo de emergencia que sirve para pedir ayuda, no funcionó el argentino quedó jugado a su suerte.
Desesperados porque Alan no había llegado al campamento de San Rafael, a la medianoche Andrés González y Martín Caffarena, miembros del Pampa Racing, decidieron ir al Nihuil para tratar de encontrar al motorista.
Recién a las 3.15 de hoy Alan se comunicó por celular con Gustavo Lossendiere, jefe de prensa de su equipo. Le informó que estaba perdido con otro competidor en las dunas y que no podía pedir auxilio por la falla al sistema provisto por la organización.
A las 7 de la mañana a González y Caffarena se habían unido otros amigos, pero seguían sin encontrar a Alan. Pero habían tenido una comunicación telefónica que les dio tranquilidad. Los pilotos estaban mojados y con frío por el temporal que azotó ayer a la zona.
Hoy muy temprano uno de los helicópteros de la organización estaba sobrevolando las dunas. Alan lo vio, pero los tripulantes de la aeronave no.
Pasadas la 8.50, Lossendiere volvió a comunicarse por celular con Alan. El diálogo siguió hasta que el motociclista vio con un endurista que andaba por el lugar. Los auxilió, les dio barras energéticas, y los llevó al encuentro con González y Caffarena.
Otra de las historias del Dakar, que por suerte tuvo un final feliz.
3 comentarios:
Que barbo lo que contas Diego..., me imagino como estara Alan.., continua en carrera, o ya se lo toma como abandono.
Muchisimas Gracas por la cobertura.., est es un vicio, te sigo a cada hora...IMPRESIONANTE!!!!
Muchas, pero muchas gracias diego!!!
Muy buen blog, que feo deve ser quedarse a la deriva por ahi...por suerte hubo un final feliz
salu2
Merda! ese Iritrack hay que estamparselo a los organizadores ya saben donde!
El mismo con el que pidio auxilio en vano Terry.
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